sábado, 30 de abril de 2016

Rise of the Tomb Raider - La Encrucijada de Lara en Xbox



El mundo de los videojuegos siempre ha estado lleno de polémicas, desde el precio de cada uno de ellos hasta los desarrollos de cada obra, pero ha sido la séptima generación de consolas (Playstation 3, Xbox 360, Nintendo Wii) la que sin duda ha causado cada vez más revuelo: juegos digitales a precio mayor que en formato físico, los famosos DLC que muchas compañías usan para, en vez de añadir contenido al videojuego completo, recortarlo para obligar a pagar más por tener el juego completo, el online de pago, etc.

Entre una de esas políticas se encuentra la de los exclusivos temporales, que para quienes no la conozcan, es cuando una compañía realiza un contrato en el que un juego determinado es exclusivo de su plataforma durante un tiempo limitado a cambio de ayudar a la desarrolladora del título.

La última víctima de dicha táctica comercial ha sido Rise of the Tomb Raider, secuela del reboot de la famosa arqueóloga que lleva entre nosotros casi veinte años. A estas alturas todo el mundo conoce a la famosa Lara Croft, pero es necesario saber que las últimas aventuras de nuestra exploradora favorita no habían conseguido encandilar a los fans, ni a la crítica ni en ventas. La saga multiplataforma Tomb Raider se encontraba estancada, por lo que Crystal Dinamics, inspirándose en las últimas obras de Naughty Dog, revitalizó la franquicia contando la historia de los comienzos de Lara, viéndola como una recién graduada e inexperta atrapada en una isla maldita, con unas mecánicas y estética parecidas a la de la saga Uncharted. El éxito fue inmediato, cosechando más de tres millones y medio de ventas en apenas 3 semanas (aunque para la editora, Square Enix, resultó un fracaso, pues esperaban más), y apenas un año después, en Marzo de 2014, ya se confirmaba que la secuela estaba en desarrollo para todas las plataformas disponibles, como su predecesora. De hecho se presentó el tráiler oficial durante la conferencia E3 del mismo año para plataformas tanto next gen como de la generación actual.

Pero fue en Agosto durante la Gamescom cuando estalló la bomba: Rise of the Tomb Raider de repente se anunciaba como exclusivo de las consolas de Microsoft (Xbox One, Xbox 360). La cólera de los fanáticos de la familia Croft se desató por medio de change.org (más de diez mil firmas en menos de veinticuatro horas) hasta el punto en que Microsoft, Crystal Dinamics y Square Enix admitieran la realidad de que dicha exclusiva era temporal, y no permanente como se quería establecer. Que los creadores vean éste cartel tras dicho anuncio resulta bastante desalentador:


Durante un año entero, tanto la distribuidora del juego Square Enix como la desarrolladora del videojuego Crystal Dinamics se hicieron los locos, y Microsoft no paraba de jugar con sus palabras para hacer creer a los usuarios de Xbox One y 360 que la nueva aventura de Lara era exclusiva de su plataforma: por una parte era sospechoso que siempre insistieran que la exclusividad era durante “Navidades de 2015”, pero por otro lado Phil Spencer insistía en que “no pagarían por un videojuego que fuese a salir en PS4”. Todas estas confirmaciones a medias confundían a los fans tanto de una plataforma como de otra, provocando infinitos debates y peleas en cada una de las noticias relacionadas con el título.

Fue finalmente en Julio de este año 2015 cuando Square Enix confirmó lo que para muchos resultó obvio: Rise of the Tomb Raider saldría en PC durante principios de 2016 mientras que para PS4 saldría a finales de ese mismo año. Y si bien esta noticia resultó un alivio para el resto de seguidores de la saga, a muchos fans de Xbox les pareció una falta de respeto, ya que Microsoft estuvo jugando a la incertidumbre sobre la duración de la exclusividad y sobre las plataformas en las que saldría.

Y ahora, tras lo que ha parecido una eternidad, Rise of the Tomb Raider por fin ha aterrizado en nuestras consolas (al menos en las de Xbox), y si bien el videojuego ha conseguido unas notas similares a la primera entrega, con una media de 86 en Metacritic, las ventas no han sido las esperadas ni mucho menos. Según twitters de trabajadores de Sony, en su primera semana, el juego no ha llegado a las sesenta y tres mil unidades vendidas entre las ventas de Xbox One y 360 en el Reino Unido, lo que es una miseria si lo comparamos con su lanzamiento anterior, que llegó a vender tres millones de unidades en menos de un mes.


Ahora la pregunta es: si el juego ha cumplido sus expectativas en términos de calidad, ¿por qué este desplomo en ventas? Para ello hay que tener en cuenta varios factores:

-        De multiplataforma a exclusivo


Como bien hemos dicho, Tomb Raider es una saga que siempre ha sido multiplataforma, y desde el principio, la base principal de los fans de Lara se encontraba principalmente en consolas de Playstation y PC. De hecho así lo corroboran las ventas de Tomb Raider de 2013: 3.06 millones de unidades en PC, 2.39 millones en Playstation 3 y 0.87 millones en Playstation 4 en su versión remasterizada. En cambio en las consolas de Xbox tenemos para la One 0.33 millones de unidades en su remasterización y 1.85 millones en la Xbox 360 en su versión original. En total Tomb Raider habría vendido desde su salida de 2013 unas 8.5 millones de copias en todo el mundo, pero al dividir las ventas en plataforma de PC, consolas Playstation y consolas Xbox, el resultado es el siguiente:

Playstation: 3.26 millones
PC: 3.06 millones
Xbox: 2.18 millones

Como se puede ver en las cifras, las consolas de Microsoft es donde menos éxito tuvo la aventura de Lara, que si bien no son malas ventas en absoluto, resultan escasas si las comparamos con la totalidad del PC y de las consolas de Sony, que abarcaron casi el 75% de las ventas mientras las Xbox se conformaban con poco más 2 millones entre ambas consolas, demostrando que la mayoría de los fans de la señorita Croft no se encontraban en las consolas Xbox.

Por lo tanto, analizándolo desde el punto de vista de los números de ventas, tiene sentido que Rise of the Tomb Raider vendiese tan poco siendo exclusivo de Xbox One y 360, siendo ambas las consolas en las que menos se vendió el juego anterior, y quedándose sin la posibilidad de expandir sus ventas en el resto de plataformas como siempre habían hecho.

-        Publicidad


Los términos del contrato de exclusividad entre Microsoft y Square Enix todavía no terminan de estar claros, pero por la información que se ha ido recogiendo desde su anuncio en Agosto de 2014, analistas del sector como Michael Patcher estiman que Microsoft llegaría a pagar unos diez millones de dólares por la exclusividad de la secuela de Tomb Raider. Independientemente de la cantidad de dinero que se gastara, lo cierto es que Microsoft ha hecho todo lo posible por ayudar a la compañía, ocupándose personalmente de la publicidad y la  distribución de Rise of the Tomb Raider, trabajo que normalmente le tocaba a Square Enix, ya que es la distribuidora de los juegos de Crystal Dinamics, creadores del reboot de Lara Croft.

Y desde luego Microsoft no ha hecho más que anunciar el juego como exclusivo propio desde entonces, sacando numerosas noticias, gameplays y todo tipo de información sobre el videojuego que desgraciadamente siempre quedaba manchado debido a la polémica de la exclusividad temporal, así como de la ambigüedad de su duración y que Phil Spencer no ayudaba en absoluto a aclarar. Pero lo que sí quedó grabado a fuego en la memoria de los jugadores, fue que Microsoft siempre quiso tener su propio videojuego de aventuras, lo que indica que realizaron dicho contrato de exclusividad temporal para competir contra Uncharted 4, juego exclusivo de Sony que iba a salir en la misma fecha que Rise of the Tomb Raider (finalmente fue retrasado para el 10 de Mayo de 2016). De hecho en la actualidad se ha expresado en más de una ocasión el placer del que gozaría Microsoft si pudieran contar con dicha franquicia en las consolas de Xbox.


Soy un gran fan de Uncharted y quería que tuviéramos un juego del estilo. Empezamos algunos, y les echamos un vistazo. Pero a día de hoy no teníamos ninguno con la calidad requerida. Esto nos pareció una oportunidad única” – Phil Spencer, 2014.

Como se puede apreciar, por muy abundante que fuese la publicidad de este videojuego, la polémica de la exclusividad siempre acababa empañando la noticia, y las respuestas a medias de Phil Spencer y sus confirmaciones no hacían más que caldear el ambiente. Al fin y al cabo, los fans de Xbox preferirían que todo el tiempo y dinero invertido en la exclusividad temporal de un juego que en realidad era multiplataforma hubiese sido empleado en crear un juego de aventuras nuevo, fresco, original en exclusiva para su consola. Daba a entender que la compra de Rise of the Tomb Raider fue escoger la vía fácil, pagando por un videojuego que ya estaba en desarrollo antes de hacer el esfuerzo de crear uno propio.

Además tampoco ayudó que meses antes de que el juego saliera a la venta, se confirmase lo que todos entendimos y creíamos desde un principio: que la siguiente aventura de Lara Croft saldría en el resto de consolas el año que viene. De esta forma, aunque todos los usuarios estaban tranquilos de saber que no se quedarían sin disfrutar del último Tomb Raider, también enfureció a aquellos que se sintieron engañados por las ambiguas palabras de Spencer, que afirmó una y otra vez que “no pagarían o ayudarían a un videojuego que saldría en PS4”. Y todos aquellos usuarios que estuvieran dispuestos a comprar la consola de Microsoft para jugar al nuevo Tomb Raider podían ahorrarse los 400 € sabiendo con certeza que el juego iba a llegar.

Sin embargo, es extraño que, tras todo el cuidado que tuvieron los directivos de Microsoft en que no se conociera la duración de la exclusividad, fuese Square Enix quien pusiera punto y final a la incógnita cuatro meses antes de que éste saliera en exclusiva de consolas Xbox. Normalmente estos contratos suelen incluír guardar el secreto de dicha duración hasta como mínimo, meses después de que éste salga a la venta. Es inevitable pensar que la propia Square Enix se diese cuenta de que Rise of the Tomb Raider no tenía las cartas a su favor para vender tanto como su precuela debido a dicha exclusividad, y que, en un intento de asegurarse ventas y fidelidad de los fans (a sabiendas de que esto perjudicaría las ventas en las consolas Xbox), decidiese revelar el secreto para que los que deseaban seguir a Lara a su siguiente hallazgo quedasen tranquilos. Sin duda es un factor a tener en cuenta.



-        Perdida en el desierto: lugar correcto en el momento equivocado

Por último pero no menos importante, hay que destacar la fecha de lanzamiento del título (13 de Noviembre de 2015), y es que no salía en una semana precisamente tranquila: el mes anterior había un montón de grandes lanzamientos que vendían millones de copias en apenas semanas, desde exclusivos como Halo 5 hasta Assassin’s Creed Syndicate o Call of Duty Black Ops III. Y Noviembre tampoco daba respiro, con juegos esperados y queridos por los jugadores durante años como Star Wars Battlefront, que salía apenas unos días más tarde. Pero sin duda, el que más afectó a las escasas ventas de Lara, fue la salida de Fallout 4, un juego muy querido por millones de jugadores que llevaban esperando una nueva entrega durante años. De hecho, fue tan mala, ya fuese la fortuna de la fecha o la mala decisión de Microsoft, de que Rise of the Tomb Raider y Fallout 4 salieran el mismo día. Si a todos los fans acérrimos de esta saga que esperaban este juego desde hace tanto tiempo le añadimos que salía en todas las plataformas actuales (en contraste con la exclusividad del juego de Crystal Dinamics), Lara acabó igual que el protagonista de Prince of Persia, uno de los iconos en los que se inspiró nuestra heroína: un grano de arena perdido en una tormenta.


Y en países como España, la situación no mejora, ya que no es secreto que en dicho país las consolas que más se venden son de la casa Playstation. En diferentes tiendas, como GAME o Xtralife pudimos recoger diferentes opiniones al respecto de la salida del juego:

DEPENDIENTE GAME – “No vende nada de nada, pero en España la respuesta es sencilla: PS4 es la que manda aquí. Tomb Raider siempre ha sido multiplataforma y no es un vende-consolas. Yo no me voy a comprar Xbox One solo por jugar Rise of the Tomb Raider porque ha sido un juego multiplataforma de toda la vida. Comprar una Xbox One por Halo es normal porque es un juegazo exclusivo, pero no es normal pagar 400 € por una consola para jugar un videojuego que va a salir en todas las consolas el año que viene.

DEPENDIENTE XTRALIFE – “Obviamente hay menos ventas ya que como sabrás la consola que manda en España mayoritariamente es PS4, en todo caso cuando salga para PS4 habrá muchas ventas seguro de ésta consola.”

DEPENDIENTE GAME – “No vende nada, pero no es nada raro. En España lo que vende es PS4.”

En definitiva, podemos llegar a la conclusión de que las malas ventas de Rise of the Tomb Raider no fueron a causa de la calidad del producto ni mucho menos (en páginas web como Hobbyconsolas o 3djuegos se le otorgó un sobresaliente), sino a la exclusiva en sí, que además de impedir su llegada a otras consolas, a su vez causó una mala publicidad, que junto con una mala elección de fecha, le dió con el piolet el golpe de gracia.

¿Se equivocaría Square Enix al elegir al caballo ganador? ¿Es posible que si la exclusividad temporal se hubiese hecho en Playstation o en PC las ventas habrían mejorado? Puede que sí, puede que no, es un misterio que no se sabrá con certeza. Lo que sí está claro es que las malas jugadas le habrán salido muy caras a Microsoft, más todavía después de haber invertido tanto en publicidad y ocuparse de la distribución personalmente para no vender prácticamente nada. Y Crystal Dinamics, tras todo el tiempo y esfuerzo en crear dicho videojuego, no poder ver los buenos resultados que el juego se merece. Aunque cabe destacar que a nivel de crítica, sí que se ha visto reflejado el fruto de su trabajo.
Parece que los más beneficiados de todo esto son Square Enix, que gracias a la ayuda de Microsoft habrá ahorrado unos cuantos millones en la distribución y publicidad del título (a pesar de sus bajas ventas), lo que podría permitirles hacer una mejor inversión cuando saquen el juego en ordenadores y consolas de Sony (lo que les hará falta para compensar las malas ventas en Xbox). Pero lógicamente, los grandes vencedores de estos resultados son los jugadores, los fans de Tomb Raider, que además de poder disfrutar muy pronto de la nueva aventura de la señorita Croft en la plataforma que quieran, posiblemente no tengan que volver a pasar por esta polémica, puesto que tanto Square Enix como Microsoft no les habrá quedado ganas de tropezar dos veces en la misma piedra.

Y sin embargo parece que Microsoft se niega una y otra vez a reconocer su metedura de pata, es más, presume de estar, junto a Square Enix, “encantados con las reacciones que ha conseguido el videojuego […], uno de los juegos más bellos que hay en el catálogo de Xbox One”, llegando a tildarlo de obra maestra. Se respalda una y otra vez en la calidad del título y en que mejorará durante la Navidad. Incluso llega a afirmar que “ha vendido bien”, llegando a comparar sus ventas con el titán Fallout IV que, en el mismo día en que ambos videojuegos salieron a la venta, se marcó el récord de vender 12 millones de unidades en sus primeras 24 horas en el mercado.

Nadie duda de la calidad de Rise of the Tomb Raider, pero no se puede evitar pensar que Microsoft no hace sino intentar esconder una y otra vez con sus declaraciones los platos que ha roto. Si la aventura de Lara hubiese vendido tan bien como afirman, a estas alturas creo que ya Microsoft y Square Enix habrían sacado pecho de su éxito, cuando la verdad es que la señorita Croft sigue perdida en el medio de la tormenta.
No se sabe exactamente qué deparará el futuro de la saga Tomb Raider tras esta aventura: ¿tendremos una continuación a las primeras expediciones de Croft o las malas ventas afectarán gravemente al desarrollo de la franquicia? Solo el tiempo lo dirá. De momento solo queda esperar que en 2016 Lara consiga hallar el tesoro en Playstation 4 y PC que la familia Xbox le impidió alcanzar.


ACTUALIZACIÓN
Y finalmente han sido 2 meses y medio el tiempo que le ha durado la exclusiva a Microsoft, pues el 28 de Enero de 2016, Rise of the Tomb Raider verá la luz en PC, mientras que los usuarios de PS4 tendrán que seguir esperando noticias para una fecha concreta de finales de año.

Y a pesar de los muchos datos y factores que afirman que las ventas de Rise of the Tomb Raider han sido discretas, Microsoft sigue sacando pecho, afirmando que, tras las ofertas digitales de Xbox Live durante navidades, la última aventura de Lara consiguió pasar de un millón de unidades. Sin embargo es difícil entender esta cifra, puesto que no consigue especificar más datos: ¿un millón de ventas en Xbox One? ¿O se refiere a las ventas de Xbox One y la versión de 360 en conjunto? ¿Se refiere solo a copias físicas o incluyendo las digitales? Todo parece indicar que se refiere a lo último, ya que otras webs como vzchartz afirmaba hasta hace un par de días que, en conjunto, Rise of the Tomb Raider no habría alcanzado el millón en ventas físicas, por lo que la oferta de la tienda de Microsoft durante el pasado mes de diciembre consiguiera ayudar a la señorita Croft para darle el empujón que necesitaba para llegar a dicha meta.

Ahora que estamos casi en Mayo de 2016, y las cifras han conseguido despegar en PC, que en una semana consiguieron triplicar las ventas en One. Ahora mismo en One se han vendido 1.17 millones de unidades, según Vgchartz, mientras que en Xbox 360 se quedarían en poco más de 370.000 unidades.

Sin embargo, aún con todo, siguen siendo cifras desalentadoras, teniendo en cuenta que fue el 13 de Noviembre cuando salió, y que su aventura anterior, en apenas tres semanas ya había conseguido sobrepasar la friolera de tres millones y medio de ventas en todas las plataformas originales. Y las declaraciones de Microsoft de no volver a realizar exclusivas temporales no hace sino confirmar de forma indirecta su descontento con estos resultados.


Ahora solo queda esperar para ver cómo reaccionarán las ventas en ordenadores y esperar cuándo los usuarios de Playstation 4 podrán volver a ver a la señorita Croft en acción.

viernes, 29 de abril de 2016

Análisis de Ratchet and Clank PS4 (Insomniac Games, 2016) - El renacer de una leyenda galáctica


Sin duda alguna, uno de los videojuegos más queridos por los usuarios de Playstation es la saga Ratchet and Clank (Insomniac Games, 2002), un videojuego de plataformas y disparos que, junto a otras franquicias del mismo género, como Jak and Daxter (Naughty Dog, 2001) y Sly Cooper (Sucker Punch, 2003), conquistaron el corazón de la PS2, lo que a su vez convirtió aquella época en la era dorada del género de acción y plataformas.


Y aunque Ratchet and Clank en concreto ha gozado de una buena salud en su salto generacional (siendo Ratchet and Clank Into the Nexus su último videojuego en 2013 para PS3), los fans no terminaban de sentir aquella magia y excelencia que marcaron los títulos de la generación anterior, así como la necesidad que tenía la franquicia de renovarse tras 10 entregas a sus espaldas (la trilogía original + Gladiator en PS2, Armados hasta los dientes, En Busca del Tesoro, Atrapados en el Tiempo, Todos para uno, Q Force e Into the Nexus en PS3). Y tampoco es ninguna novedad que este género tan querido por los jugadores no ha pasado su mejor momento desde entonces, ya que dichos videojuegos del género brillan por su ausencia en las consolas actuales.


Es por eso por lo que Insomniac Games decidió ponerse las pilas y empezar de 0 la historia de nuestro lombax favorito y su amigo robótico, cogiendo lo mejor tanto a nivel argumental como jugable de toda la saga para darle un toque más fresco y adaptarlo a los nuevos tiempos. ¿El resultado? Veámoslo a continuación:

La galaxia nos espera.


Ratchet and Clank de PS4 es un videojuego difícil de encasillar debido a todas las facetas que cubre:
Por una parte podríamos considerarlo como un remake del videojuego original, ya que reinicia la saga y muchos de los mundos, armas y desarrollos de niveles que contiene son sacados del primer título de la franquicia, pero rehechos desde 0, pero tampoco sería correcto dicha definición debido a que ofrece un planteamiento más directo, con nuevas armas, mecánicas jugables, planetas y sobre todo, una historia que si bien respeta las bases originales, ha cambiado mucho, mostrando suficientes novedades para considerarlo un juego nuevo. Y al mismo tiempo, es una adaptación de la película oficial inspirada en el videojuego original, en homenaje a la tendencia, hasta hace poco habitual, de adaptar todas las películas a las consolas. De hecho usa sus mismos recursos, como escenas de vídeo sacadas directamente del largometraje mezcladas con cinemáticas in game de tal calidad que siempre nos hacen dudar cuál pertenece a la película y cuál a la aventura de PS4.


 La historia de Ratchet and Clank como hemos dicho, parte de la idea original que muchos fans sabrán reconocer, pero con un guión renovado casi en su totalidad y con una narrativa mucho más sólida. Sin ir más lejos, nuestro narrador no es otro que el capitán Quark, quien nos contará la historia de cómo un lombax rescató a un robot y cómo ambos salvaron la galaxia de las garras del ejército de la compañía Drek a la vez que forjaron su eterna amistad. Con esta trama de fondo, y con el clásico humor que caracteriza a esta pareja (que nos harán reírnos en alto bastantes veces), nos embarcamos en una divertidísima y variada aventura que no nos dejará soltar el mando hasta acabarla y explorar todos y cada uno de los planetas a los que viajaremos, que no serán pocos precisamente, empezando con el planeta natal de Ratchet, Vendil, donde no solo intentará llegar a formar parte de los rangers, sino donde conocerá a su pronto inseparable robot y compañero de aventuras.


Desde el primer minuto, el videojuego respira una magia tanto a nivel visual como a nivel jugable que no habíamos sentido en años en una consola, ya sea por la belleza de sus escenarios, la vida que hay en los mapas, los diseños impecables de los personajes, los colores intensos y una iluminación intachable, sumado a la variedad de decorados que muestra y a las perfectas y fluidas animaciones del panel completo de personajes tanto principales como secundarios, hace que nos olvidemos de que lo que estamos viendo es un videojuego y no una película de animación en todo su esplendor, que perfectamente podría ser de Disney Pixar. Sin ir más lejos, cada vez que tenemos escenas de vídeo, hechas con las mismas animaciones, físicas y motor del videojuego, y éstas se intercalan con las cinemáticas de la propia película, siempre dudamos de cuál estamos viendo porque apenas hay diferencia entre una y otra.

Lo mismo se puede decir a nivel de gameplay: desde el momento en que controlamos a Ratchet y empezamos a recorrer los diferentes niveles del videojuego, notamos como tanto el ritmo de la acción como la variedad de situaciones va en aumento, primero armados solo con nuestra llave y nuestras habilidades de salto y escalada que nos ayuda a completar las diferentes plataformas y esquivar a la inmensidad de enemigos que nos salgan al paso, desde las criaturas salvajes de cada planeta hasta los ejércitos que nos persiguen. Pero poco a poco, a medida que avanzamos y vamos consiguiendo suficientes guitones (dinero que el juego nos da por destruir cualquier enemigo u objeto que encontremos en el camino), vamos accediendo al inmenso arsenal del lombax. Después de todo, ¿qué sería Ratchet and Clank sin estar armados hasta los dientes? Desde las armas más conocidas de la franquicia hasta nuevas adquisiciones como el pixelator, el cabrinator o marchinator (armas tan divertidas como útiles y letales), el armamento de Ratchet va aumentando para darnos mayor poder y variedad a la hora de acabar con nuestros enemigos, ya sea de la forma más rápida y sutil o ya sea para partirnos la caja mientras convertimos al alienígena más feo y aterrador en una imagen pixelada al más puro estilo arcade o convertirlo en el nuevo copito de nieve de Heidi.


Si bien las principales dosis que nos ofrece Ratchet and Clank en PS4 son disparos en tercera persona salpicado con plataformas, como bien sabemos los fans, este título no se limita única y exclusivamente a dichos géneros ni mucho menos, añadiendo una variedad inmensa con diferentes fases de persecución, infiltración e inteligentes puzles mientras controlamos a Clank, escenas de carreras y batallas espaciales en las que derrotaremos a cualquier nave enemiga que se nos ponga por delante, zonas de buceo, duros jefes finales y sobre todo mucha exploración, ya que los planetas, sin llegar a ser de mundo abierto, gozan de la suficiente amplitud y calidad de diseño como para invertir horas de búsqueda en las que completaremos tanto las misiones de la historia principal, así como secundarias que nos permitirán hacernos con utensilios necesarios para avanzar en la trama o los diferentes coleccionables que nos encontremos. De hecho hay muchas fases que si no disponemos del objeto adecuado para cruzar, como las magnetobotas, el succionador o el super propulsor, no podremos seguir hasta que hayamos explorado o cumplido nuestro objetivo en el planeta concreto, lo que nos invita a investigar cada rincón del juego y a sumergirnos cada vez más en su atmósfera, sin llegar nunca a cansar. Todo lo contrario: la aventura no hace sino variar y aumentar de ritmo hasta el punto de que no querremos despegarnos de la consola hasta llegar al final de la epopeya galáctica con la que el capitán Quark nos deleita y nos guía con su fanfarronería y sentido del humor.


 Además, los genios de Insomniac Games añadieron un toque del género RPG de tal forma que tanto nuestras armas como el propio Ratchet podrían subir de nivel para aumentar su salud y al mismo tiempo desbloquear habilidades y mejoras para cada una de nuestras herramientas, así como poder mejorar nuestras estadísticas. Ya sea explorando los amplios y bellos escenarios que nos embriagan con la nostalgia, derrotando a enemigos conocidos y a los numerosos jefes finales nuevos por igual o avanzando en la fiesta parda que Ratchet y Clank han montado, encontraremos diversos coleccionables a lo largo de la aventura que nos resultarán como mínimo muy útiles: por una parte tendremos el raritanio, cristales que nos permiten comprar mejoras de cada una de nuestras pistolas (aumento de munición, alcance, potencia, etc); las cartas holográficas que además de mostrarnos datos de todos los personajes y escenarios de la franquicia, nos servirán para mejorar nuestras habilidades (mayor cantidad de guillotines, cartas, mejora del daño, etc) y que cual colección de cromos, podremos completar cambiando por cada X cartas repetidas para finalizar nuestra colección. Dentro de estas cartas, también encontraremos las tarjetas TAUN, las cuales se encuentran escondidas por toda la galaxia, pero que si conseguimos encontrarlas todas, se nos obsequiará con el arma más poderosa del juego. Y por último, tenemos los clásicos guitones de oro que nos irán desbloqueando jugosos extras, desde galerías de arte, salas de museo, vídeos hasta trucos y apariencias.


Como podeis observar, no hay pocas cosas que hacer en la odisea galáctica que estos dos héroes nos invitan a vivir: completar tanto las misiones principales y secundarias de la aventura por primera vez explorándolo todo, con todas las armas, tarjetas TAUN y los guillotines de oro, no nos bajará de las 22-25 horas. Y de hecho, eso no significa el final del juego ni mucho menos, pues al terminar el modo historia, el videojuego nos ofrece volver a jugar al modo desafío, que actúa a modo de partida plus en las que conservaremos todos nuestros coleccionables y mejoras conseguidos en la primera pasada, pero en la que, además de poder recoger todo lo que se nos haya olvidado o que no hayamos podido completar, nos propone la oferta de comprar las nada baratas pero poderosas armas Omega, unas versiones mejoradas y todopoderosas de nuestro arsenal que no son nada baratas (la más cara siendo de un millón de guitones). ¿Cómo conseguirlo? Esa es la clave de este modo desafío, y es que a diferencia de la primera partida, en esta segunda vuelta, se activará el multiplicador de guitones que, como bien dice el nombre, multiplicará el número de dinero que recibiremos dependiendo de los enemigos que vayamos matando sin recibir daño, lo que nos incita a cambiar nuestra estrategia de juego y a usar todas nuestras herramientas en el momento exacto. Si a todo esto sumamos el tener que subir de nivel y mejorar todas nuestras armas al 100%, subir a Ratchet al máximo nivel, completar la colección de cartas holográficas, y hacer limpieza de los trofeos (que actúan a modo de los antiguos puntos de habilidad), así como los diferentes modos de dificultad de juego (que se puede cambiar en cualquier momento), nos encontramos ante un título no solo muy duradero sino MUY rejugable, que yendo a saco no nos bajará de las 12 horas, pero que completar al 100% implicaría  completarlo unas 3 veces y que en total nos llevaría en torno a las 50 horas de juego. Una duración de variedad y diversión triple A para nada reprochable, que encima nos sale a precio reducido, encontrándose por 33 € de salida en Amazon.es y en Mediamarkt en formato físico.


Si ya en el apartado visual y jugable es excelente, no se puede encontrar ninguna pega ante el sobresaliente apartado sonoro característico de la franquicia, contando con todas las voces originales y actuaciones sobresalientes de cada uno de los personajes que nos encontramos, así como geniales efectos de sonido y la banda sonora clásica de la franquicia, revitalizada, que junto a los familiares diseños de niveles hacen que los fans de Ratchet and Clank se sientan como en casa recordando los momentos que vivieron con ambos amigos hace ya 14 años.

Y es que son muchos los guiños que encontraremos al videojuego original, muchas situaciones y niveles nos harán recordar los niveles que disfrutamos en el Ratchet and Clank de 2002. ¿Significa eso que nos encontramos ante el mismo juego? En absoluto, porque si bien el título puede compartir ciertos diseños y bases, la experiencia se siente más natural, renovada, fresca, e innovadora. Es una obra que si bien muestra un gran cariño hacia los seguidores de la franquicia y que derrocha amor por la primera entrega de la saga mediante referencias y dejavús, la experiencia es totalmente nueva, únicamente embriagándonos de nostalgia de forma puntual por todos los buenos momentos que vivimos en PS2.


En definitiva: ¿es el reinicio de la franquicia Ratchet and Clank todo lo que esperábamos? Tanto y más, MUCHO más. El título no se limita a un remake del juego original, sino que decide coger lo mejor de cada una de las entregas conocidas hasta la fecha tanto a nivel narrativo como jugable y, junto a un buen puñado de novedades, consiguen crear un título nostálgico a la vez que innovador que mezcla con maestría una gran diversidad de géneros (plataforma, shooter, RPG, carreras, puzles, exploración, etc) en una aventura con un ritmo que cada vez va a más y con un control y desarrollo sólido y fluído. Todo creado con un cariño y cuidado digno de una película de animación 3D que no tiene nada que envidiarle a una superproducción del ratón Mickey o de los fundadores de Pizza Planet y un apartado sonoro tan sobresaliente como la diversión, humor y excelente ambientación que nos mantendrá pegados a nuestra PS4 durante unas cuantas semanas. Un imprescindible de PS4 que ha traído de vuelta por la puerta grande el género de plataformas a la grandeza que se merece y que lo único que hace es pedir a gritos no solo más juegos de Insomniac, sino de Naughty Dog, Sucker Punch y Sanzaru Games. Después de jugar al magnífico reboot de Ratchet and Clank, ¡¡¡QUEREMOS TAMBIÉN A JAK AND DAXTER Y SLY COOPER DE VUELTA YA!!!


92: Un excelente reboot que renueva tanto a nivel jugable como a nivel narrativo con toda la magia de la saga original. Un título espectacular en todos los sentidos. Imprescindible de la PS4.


+ Los gráficos más bellos e impactantes que se hayan visto en una PS4, con una animación, diseños de personaje, fluidez, iluminación y espectáculo digno del estudio de Disney Pixar, que llega hasta el punto de no diferencias las cinemáticas in-game de las sacadas de la película oficial e incluso del propio videojuego.
+ La narrativa es mucho más sólida respecto al título original, compartiendo el guión con la película.
+ La variedad de géneros que empaña el título y que nos engancha cada vez más, con unos desarrollos de nivel geniales que divierten hasta más no poder y un ritmo mucho más marcado.
+ La cantidad y variedad de planetas, armas, jefes finales,…
+ La excelente duración del título: 12 horas si vamos a saco, 50 si queremos verlo todo. Por no hablar de la rejugabilidad que tiene gracias al modo desafío y a todo el contenido desbloqueable.
+ El perfecto doblaje a nuestro idioma, así como la genial banda sonora y efectos de sonido.
+ El clásico humor de la franquicia adaptado a la actualidad.
+ Que solo cueste 32 € de salida.

-        Que no incluya algún modo de juego extra como los clásicos modos arena.
-        Que no metieran más batallas espaciales.


Aquí dejamos un tráiler final del videojuego:



Ratchet and Clank está disponible para PS4 desde el 20 de Abril, y lo podeis encontrar por 33 € en Amazon.es y en Mediamarkt:



Y para los fans de las aventuras del famoso lombax como para los que disfruten con este viaje intergaláctico, recordamos que hoy se estrena la película basada en el videojuego original y que a su vez comparte argumento con la entrega de PS4 y del que pronto se realizará una crítica correspondiente. Aquí dejamos un trailer oficial de la cinta:


jueves, 28 de abril de 2016

Crítica de El Libro de la Selva (Disney, 2016)

Hay muchas historias que rondan por las selvas de la India, pero ninguna tan única y curiosa como la del cachorro humano llamado Mowgli…


Muchos somos los que hemos oído estas mismas palabras de Bagheera, la pantera negra en aquella cinta de 1967 creada por Walt Disney inspirado en la obra literaria de Kipling, El Libro de la Selva, que comenzaría lo que sería la edad dorada de la animación. Y aunque ésta es considerada un clásico entre los millones de niños que nos criamos con el dulce Baloo y bailando al ritmo de la jungla con Louie, son muchas las personas que pensamos que dicha cinta fue una oportunidad desperdiciada de contar una historia mucho más profunda y sólida de la que nos relataron, más todavía si conocemos la verdadera vida de Mowgli y que el propio Disney prohibió que los creadores se leyeran para evitar que su inspiración afectase a la producción. A día de hoy sigue gozando de personajes carismáticos y con unas animaciones espléndidas, pero que a nivel de relato resulta pobre, sencillo e inexistente, en el que los propios protagonistas no se toman nada en serio: ni los peligros de la selva, ni la lógica, solo importa ponerse a cantar y nada más. Brilla por su portada y su apariencia, pero no por su contenido.

Es por esta razón, tras el éxito que Disney ha cosechado con las primeras adaptaciones de sus cuentos más clásicos en películas live action (como Maléfica o La Cenicienta), que la creación de una película real sobre El Libro de la Selva fuese su siguiente objetivo. Su director, que también trabajó en Iron Man, confirmó que su meta era conseguir una adaptación fiel a la estética y personajes de Disney, pero con las bases más importantes del libro y con una historia mucho más profunda en un intento de contar su propia versión sin alejarse de sus orígenes de la animación o la literatura.





Y vaya si lo ha conseguido: desde el primer momento que nos sentamos a ver la película, la cámara nos conduce por unos bellos y exóticos paisajes que casi podemos sentir y animales que casi podemos tocar, con una música que nos envuelve en la nostalgia al reconocer trozos de las melodías originales o pequeñas pinceladas de éstas en las nuevas soundtracks. La historia mantiene la base de la película de animación con Mowgli, un cachorro humano encontrado por la pantera negra y criado en la manada de lobos de Akela, se ve amenazado por la presencia de Sheer Khan, quien cegado por su sed de sangre y odio al hombre, jura matarlo. Por lo que, para proteger tanto a la manada de lobos como al chico, Bagheera decide llevarlo de vuelta a su lugar de origen. Hasta ahí, junto con la estética de la película y el atrezo y vestimenta de los personajes, vemos que la película camina sobre las bases de la compañía de Mickey Mouse.


Sin embargo, el guión se muestra de una forma más seria y sólida, mostrando las dificultades físicas y morales que Mowgli siente al ser diferente de su manada, que a pesar de todo, le aprecia con creces. La presencia de los lobos y la ley de la selva, al igual que en el libro, es mucho más importante, así como la amenaza real de Sheer Khan que nos mantiene en tensión durante toda la trama. La selva, si bien es hermosa y exótica, también muestra sus peligros, sin ser el juego de niños que nos vendían hace casi 50 años. Y las situaciones se desenvuelven de una forma mucho más lógica y con consistencia, y con unos personajes fieles a los de la película de animación, pero que resultan mucho más creíbles en cuanto a actuación y a nivel de personalidad: Mowgli, si bien es un niño y muestra esto en muchas facetas como su lado juguetón e ingenioso al usar trucos, entiende los peligros que corre, y sabe desenvolverse en la selva, y Bagheera se muestra si bien igual de estricto y un pelín gruñón, también se demuestra muchas veces el cariño y deseo de proteger al pequeño a toda costa, así como Baloo sigue siendo el bonachón que conocemos con un lado más pícaro. La relación de todos los personajes principales está mucho más equilibrada, teniendo todos la misma importancia (en la de animación, una vez sale Baloo, se da carpetazo al resto) y un desarrollo mucho más natural y no tan apresurado y forzado. Sin hablar de las escenas que te enternecerán, que te harán desternillarte de la risa y de las increíbles escenas de acción, como el bosque en llamas. La cinta en general mantiene un buen ritmo que nunca se llega a romper y que quieres que la aventura siga.


A esto hay que sumarles constantes referencias que se funden a la perfección con la película sin llegar a causar dejavú o a que nos parezca que estamos viendo la misma cinta: por una parte los guiños a la película son más que evidentes (el prólogo, el encuentro con Kaa, la escena del río, la banda sonora, el final…), y por otra la misma cantidad de referencias al libro de Kipling: la ley de la selva, los diálogos directamente sacados del libro, situaciones que o bien actúan igual o que sencillamente homenajean los eventos originales de la obra literaria, como la estampida de los búfalos o el respeto hacia los elefantes… Lógicamente no llegará a ser tan fiel al libro (debido a ser tan oscuro), del cual únicamente consiguió el anime japonés shonen Mowgli que se estrenó en España a principios de los 90. Es una historia que si bien se apoya en ambos pilares, consigue desenvolverse de tal forma que crea su propia versión del cuento sin desmerecer o serle infiel a ninguna de las obras literarias o fílmicas.


A nivel gráfico es imposible ponerle pegas, ya que los gráficos, si bien son todos hechos por ordenador, muestran un nivel de realismo y de belleza impresionantes que te hacen dudar de si lo que estás viendo es real o no, los personajes están tan vivos como el propio Mowgli y si bien hablan, sus expresiones faciales y corporales están tan cuidadas que apenas nos damos cuenta de que son CGI y sus movimientos y expresiones faciales están limitadas a las que podría tener cualquier otro animal de su especie para mayor realismo. La iluminación y los diferentes tonos de color que tiene la selva así como el esmero en el detalle de las localizaciones, consigue que nos traslademos de lleno a la jungla de la India, además de mostrar el cariño por la cinta original al ver recreadas ciertas escenas concretas de la película a la perfección o el ingenio del simbolismo o la mitología en algunas escenas (la loba blanca, el fuego como símbolo de poder y codicia del hombre, etc). Las únicas pegas que se pueden destacar son más bien fallos de raccord en puntos concretos del film en el que las cicatrices de Mowgli desaparecen y vuelven a aparecer, o que ciertos animales son de origen africano y no indio.


Y a nivel sonoro cumple perfectamente mediante un buen doblaje de personajes debido a una buena interpretación de éstos y a una banda sonora refrescante que te mantiene en vilo en las escenas de acción y te emociona en los momentos más emotivos, así como embriagarnos de nostalgia al reconocer ciertas partituras o tonos de melodía de Disney.

También cabe recordar que la película NO es un musical, pues aunque encontraremos dos canciones (Busca lo más vital y Quiero ser como tú), ambas son muy breves y actúan como narradoras de dichos momentos sin llegar a cortar el ritmo de la historia en ningún momento. La única que a lo mejor no llega a pegar del todo es la del rey Louie, pues aquí se muestra como un personaje imponente, poderoso y orgulloso, para nada el juerguista que conocimos en la cinta anterior, pero por fortuna es lo suficientemente corta como para no estropear la narrativa o el ritmo de la acción.

En resumen, El Libro de la Selva es una película preciosa, entretenida, divertida y emotiva que homenajea tanto a Kipling como a Disney (150º y 50º aniversario respectivamente) tomando ambas como base para contar su propia versión de la historia de una forma más seria y realista, con una ambientación y apartado artístico perfecto y una banda sonora que nos mete de lleno en escena y nos hace recordar que estamos de vuelta con nuestros viejos amigos. La mejor adaptación de un clásico Disney Live Action hasta la fecha.


90. Una nueva versión de El Libro de la Selva que goza de las bases tanto de la obra original como de los personajes clásicos de Disney, en un argumento y ritmo de acción mucho más sólido y lógico con una ambientación y recreación de la selva que te dejará con la boca abierta y con una música preciosa y de lo más vital, nunca mejor dicho. La mejor adaptación live action de Disney hasta el momento. Te guste la película original o no, hay que verla.


+ Artística y gráficamente preciosa, casi imposible distinguir los personajes reales de las CGI
+ Atmósfera perfecta, una recreación impresionante, bella y enfermiza de la selva de la india
+ Perfecta caracterización e interpretación de los diferentes personajes originales de la película de Disney
+ El genial homenaje sonoro a la película de animación sin olvidar crear preciosas melodías nuevas
+ Las incontables referencias a la película y al libro original
+ Un guión mucho más sólido que la versión de Disney que plantea la historia de forma más realista, con toques de la casa pero que trata temas del libro, creando su propia versión de la historia sin ser infiel a las obras originales


-        Algunos pequeños fallos de raccord difíciles de apreciar, como cicatrices que aparecen y desaparecen en un punto concreto o animales africanos en una ambientación de la selva de la India.

-        Al nuevo Louie no le pega mucho su canción, pero por fortuna es corta y no llega a cortar el ritmo de la película.

Aquí os dejo el tráiler final de la película:





jueves, 21 de abril de 2016

Racismo de consolas

No sé a cuántos os pasa esto últimamente, pero en mi caso llega un momento en que tengo que abstenerme de los foros y de los comentarios de las noticias de videojuegos, no solo para no entrar en una guerra sin sentido, sino para no recibir pedradas. Echo de menos la época en la que se disfrutaba de los videojuegos y daba igual en la consola que saliera y no importaba las consolas que tuvieras, lo importante era divertirse y pasarlo bien con los juegazos del momento, fuese de una PS2, una Game Cube, Xbox, PC, Super Nintendo o Game Boy Color.


Y sin embargo, personas como yo, que tienen PS4 o los que nos gustan algunos de los videojuegos de Ubisoft (Prince of Persia y Assassin’s Creed) parece que tenemos que escondernos y andarnos con cuidado cuando comentamos en los foros, porque vamos a recibir palos por los cuatro costados. ¿Por qué? Por moda, así de sencillo.

Y es que desde hace algunos años, ha habido un grupo, un montón de gente, que se hace llamar Xboxer, Nintenderos o Pceros (aunque no lo sean después) que lo único que hacen es insultar y despotricar contra todo lo que tenga que ver con Sony y también a sus consumidores, hasta el punto de despreciar a alguien por tener una PS4.

Así es, el racismo consolero es una realidad, triste pero cierto.

Si bien es verdad que muchos sabeis que la mayor parte de consolas que tengo son de Sony (PS2, PS3, PS4, PSP y PS Vita) porque sus videojuegos exclusivos me encantan, pero no por ello quiere decir que esté de acuerdo con todo lo que han hecho: yo no piqué el pagar 600 € por una PS3 nueva, y esperé a la versión Slim por la mitad; también les puse a caldo por no ofrecer retrocompatibilidad, aunque en mi caso no es un problema porque conservo mis consolas en perfecto estado, y también afirmo que hay muchos meses en los que las colecciones instantáneas del Plus han tenido un bajón más que considerable. Y también soy de los que afirma que como Sony confirme la “PS4K” o “PS4 Neo”, les tiraré mi consola a la cabeza, salvo que se limite a un modelo Slim y nada más, claro.

La diferencia que hay entre yo y éste grupo, es que yo, aparte de no dedicarme a despotricar otras consolas durante las 24 horas (me parece que todos tenemos cosas más importantes que hacer que eso), yo veo los pros y los contras, no defiendo una consola a capa y espada y defiendo lo indefendible o critico lo mismo que ocurre en mi “terreno”. Sí, porque esta gente, da igual la consola que sea, les tiene unido el odio hacia Sony, da igual que sea rumor, que sea mentira, que sea verdad o que las plataformas que defiendan hagan cosas peores, el caso es encender las antorchas contra la compañía nipona.

Para ellos vamos a repasar unos de los últimos casos más conocidos para que veais el doble rasero que tiene esta gente:


A)     Muchos habréis visto ya un tráiler argumental de Uncharted 4 a estas alturas, y seguramente algunos lo sabrán ya o lo habrán pasado por alto, pero cuando dicho vídeo se colgó, Naughty Dog, sin querer, metió una ilustración conceptual de por medio que no era suya, sino un concept art del videojuego Assassin’s Creed IV Black Flag (Ubisoft, 2013). La compañía respondió de forma amistosa con un tweet en el que decía “Ahora entiendo el título de “ladrón” del videojuego ;)”. Sí, parece una pulla, pero cabe recordar, que entre Ubisoft y Naughty Dog siempre hubo guiños entre ambas franquicias. Sin ir más lejos en Black Flag, podías conseguir armas y utensilios de Sir Francis Drake, figura principal de la saga Uncharted, y por ello hasta cierto punto sería lógico pensar que Naughty Dog colgaría ese concept art dentro del tráiler a modo de guiño a la temática de ambas aventuras. El problema fue que Naughty Dog utilizó sin permiso dicho concept art, por lo que lo modificó y pidió disculpas inmediatamente por ello. Todo parecía ir genial porque ambas compañías se lo habían tomado con buen humor y hasta ahí todo perfecto.


Pero lo que me alarmó de dicha situación no fue la actuación de ambas desarrolladoras, sino de los usuarios: la gente insultaba a Ubisoft por atreverse a acusar de robo a Naughty Dog, afirmando que sus juegos eran una porquería y que tendrían que dar gracias de que Naughty Dog “promocionara” su videojuego usando su material y que por ser la compañía que fuera, que podía robar lo que le diera en gana.

Yo soy tanto fan de Naughty Dog como de Ubisoft, siendo mis juegos favoritos obra de ambas (Jak and Daxter, Uncharted, The Last of Us, Prince of Persia, Child of Light, Assassin’s Creed, etc), pero en mi caso, el fanatismo jamás me cegó hasta el punto de decir semejantes patrañas, y es que parece que la moda últimamente es insultar y tirar mierda gratuíta contra Ubisoft, haga las cosas bien o mal. Lo que pasa es que muchos de los críticos no saben lo que es dedicarle horas a un trabajo y que luego alguien te lo coja sin permiso y lo use como suyo propio para promocionar algo, y eso lógicamente, duele, ofende y enfada. Y en este caso, la culpable fue Naughty Dog, porque además seamos sinceros: ¿de verdad le hace falta usar sin permiso arte que no le pertenece a la compañía que ha creado las sagas más importantes de Sony en los últimos 30 años? ¿Los mismos que publican estos mismos libros que tengo yo en mi casa?



Pero claro, como la moda es criticar a Ubisoft, pues nada, la víctima de esta historia se convirtió en culpable por popularidad.

B)     Ahora vamos con otro caso más reciente que concierne a un exclusivo de Sony, The Order 1886 (Ready at Dawn, 2015) y a otro de Microsoft, Quantum Break (Remedy Studios, 2016). Como sabeis, ambos títulos comparten la inmensa expectación del público por estas nuevas franquicias, creyendo que serían de los videojuegos más importantes de sus años correspondientes. Pero como sabréis, The Order 1886 se convirtió en la decepción del año (cosa que puedo corroborar porque lo jugué el día de lanzamiento) por las siguientes razones:

è Escasa duración (8-10 horas)
è Abuso de cinemáticas que cortaban el ritmo
è Escasa jugabilidad debido al abuso de cinemáticas que abarcaban la mitad de su duración y el exceso de quick time events
è Bandas negras

Si bien es verdad que fue una decepción que los propios fans de Sony reconocieron, eso no impidió a este grupo de haters divertirse insultando y riéndose de los poseedores de PS4 con este videojuego usando dichos fallos como excusa, afirmando que los videojuegos “peliculeros” eran basura, y así aguantando todo esto hasta el día de hoy.

Por fortuna, hay un factor que olvidaron: el karma. Y es que ahora, cuando salió Quantum Break, se confirmó que dicho título tan querido y esperado por ellos, tenía los mismos fallos que el exclusivo de Sony, e incluso fallos más graves que The Order:

è Escasa duración (8-10 horas)
è Abuso de cinemáticas y vídeos que cortan el ritmo (de las 8 horas que dura, casi 4 horas son cinemáticas y la serie de televisión, corroborado por jugadores)
è Escasa jugabilidad y escenas de tiros
è 720p
è Está doblado a 10 idiomas, incluído el español latino, pero nos llega en inglés sin doblar por su “naturaleza única”
è Subtítulos que fallan e incluso ausentes, por lo que es difícil enterarte de todo lo que ocurre en la historia
è Se anunció para PC un mes antes de su salida, tras 3 años diciendo que iba a ser exclusivo de Xbox One
è La versión desastrosa de PC

Pero claro, ¿creeis que hubo la misma crítica hacia dicho exclusivo? No, se hizo el silencio, e incluso hay muchos que lo siguen defendiendo a capa y espada y afirmando que, los fallos por los que siguen criticando The Order ahora son aciertos, y que la dura crítica de prensa que tanto se aplaudió el año pasado, ahora son maletines que Sony ha pagado en contra de su videojuego favorito que es una joya innovadora que es la primera en usar el tiempo como arma y tema principal de una historia. Claro, ningún videojuego ha hecho eso, ¿seguro?



Viva la hipocresía y el doble rasero.

C)     Ahora para terminar vamos con los rumores, tanto sobre consolas como sobre los retrasos, y es que desde hace un mes o dos, no paramos de recibir rumores sobre una supuesta PS4K que supuestamente tendría más potencia que la actual, pero que no tendría exclusivos ya que sería como una revisión. Estoy de acuerdo en que la gente esté molesta si esto se llega a cumplir porque la consola no tiene ni 3 años y ya están sacando una consola con más potencia, pero es que no está NADA confirmado, son solo rumores que luego se cumplen o no, porque estos prototipos bien podrían ser o para una versión Slim o para una futura consola.

Pero esto no impide que desde hace días los haters no paren de insultar y reírse de los usuarios que poseemos esa consola y llamándoles estafadores, sin ver la hipocresía que desprenden. ¿Estos se quejaron cuando Nintendo anunció la New 3DS, una revisión de la consola con más potencia pero con exclusivos propios como Xenoblade? ¿Les tacharon de estafadores? No, aplaudiendo con las orejas y comprándolas el primer día, pero ahora resulta que es Sony la mala, la que empieza esta tendencia. La diferencia es que todo lo que estamos oyendo ahora mismo son rumores, no hay nada confirmado hasta que la propia Sony lo diga, que seguramente lo hará en el E3. En cambio la 3DS fue una realidad como una catedral de la que nadie se quejó. También es una realidad que con la Wii U, con 3 años recién cumplidos, y ya Nintendo nos estaba diciendo que su nueva consola (Nintendo NX) se anunciaría y saldría este año. Que a una consola de sobremesa con apenas 3 años de vida que costó 350 € de salida (50 € menos que la consola más potente del mercado, PS4) y que sigue costando 300 € a día de hoy ya se le dé carpetazo tan pronto es grave. ¿Alguien se queja? No, no pasa nada, todo genial, hasta hay algunos que afirman que Sony va a sacar una consola nueva porque tiene miedo de NX, consola con la que estamos igual que con la PS4K o la Xbox One Slim: se dice mucho pero no se sabe nada porque todo son rumores. Ridículo.


Y con la One más de lo mismo, porque si bien el director dijo que no pensaban en sacar un nuevo modelo de consola, de la One siguen sacando los mismos rumores que de los de la PS4K. Pero claro, los únicos rumores que conviene tomar como “datos oficiales” son los de Sony, pero los de Microsoft no cuentan, ¿no? Si nos ponemos en el mismo plan, al menos Sony no ha mentido a nadie porque ni lo ha confirmado ni lo ha desmentido, más grave sería lo de Microsoft, que tras decir que no la sacarían, al final sí lo hicieran, porque habrían mentido a la cara directamente a sus clientes.

Y con los retrasos, no hacen más que dar palos a Sony, que si vende humo, que si todos sus juegos se retrasan, ahora con el rumor de que Horizon Zero Dawn se retrasaría a 2017, y muchos tomándolos como verdades absolutas cuando fue la propia Sony la que afirmó hace escasas semanas que tanto Horizon Zero Dawn como The Last Guardian saldrían a finales de este mismo año. Pero claro, se le da más importancia a un rumor que a una confirmación oficial porque conviene más el trolleo. Porque aquí la única que vende humo según este grupito es Sony. Yo a estos usuarios les pregunto: ¿cuánto tardó Quantum Break en salir desde su anuncio? ¿Salió el mismo año que se anunció? Porque que yo sepa se anunció en 2013 como exclusivo de One para 2014, que luego se retrasó en 2015, y finalmente se retrasó para salir ahora en Abril de 2016, y que tras 3 años de promoción como exclusivo de consola, que se anunciara para PC a un mes de salir. O Nintendo anunciando el Legend of Zelda exclusivo de Wii U en 2014 y que a día de hoy hemos visto como mucho un teaser y una breve demo técnica, y que si hacemos caso a los rumores (si hacemos caso a los rumores de Sony y Microsoft, Nintendo no será la excepción), podría incluso no llegar a salir en Wii U para ser un exclusivo de NX o, en el mejor de los casos, que salga para ambas, siendo una de las versiones un port. Si tenemos en cuenta que muchos se compraron la Wii U solamente por este exclusivo, esto tendría que ser motivo de mucho cabreo, al igual que pasó en Xbox One con Quantum Break que al final salió en PC. ¿Pero pasó algo? Nada en absoluto, todo es perfecto, estupendo. Pero si fuera Sony la que estuviera haciendo estas acciones, la gente ya habría sacado las antorchas hace tiempo.



Sé que voy a recibir muchos palos por todo lo que estoy diciendo, que muchos me tacharán de Sonyer malvado que odia el resto de consolas, pero todo lo contrario: me crié con un ordenador jugando a Prince of Persia Las Arenas del Tiempo y Tarzán de Disney, El Rey León de la Super Nintendo, Jak and Daxter de PS2 y Pokémon de la Game Boy Color, y en aquella época daba igual la plataforma en la que jugaras, lo importante era divertirte y disfrutar con lo que jugabas. El único problema era no tener suficiente ahorrado para los juegos que querías o para la consola nueva o que no tendrías tiempo a jugar todo lo que querías.

Y sinceramente echo de menos esa época, porque en vez de disfrutar de un hobby (que en mi caso estoy intentando convertir en profesión), parece que ahora se convierte en una preocupación o motivo de peleas.


Como un usuario que dijo una vez en Hobbyconsolas y nunca mejor dicho, “paz y amor y las consolas en el salón”.

lunes, 18 de abril de 2016

Actualización del blog 18/04/2016

Siento mucho el retraso con los análisis, pero a partir de ahora voy a procurar sacar un análisis de videojuego y otro de película por semana. Además también empezaré a hacer una crítica o comentarios y reportajes sobre diversas situaciones de videojuegos. También estoy analizando más obras.

Sé que es una lata, pero creedme cuando os digo: la espera merece la pena.


lunes, 11 de abril de 2016

Crítica de Star Wars Episodio VII El Despertar de la Fuerza (Star Wars Episode VII The Force Awakens, 2015)

Parece increíble que fuese hace 30 años cuando conociéramos al joven que nos enseñó los caminos de la fuerza, y también que fuese hace más de 10 años en Mayo de 2005, cuando por fin vimos lo que en aquel momento creíamos que era el final de la historia, La Venganza de los Sith.

¿Se había cerrado el círculo? Eso creíamos, hasta que Disney tomó las riendas de Lucas Films y decidió crear una nueva trilogía, basada en una de las ideas originales de su creador George Lucas, una nueva serie de aventuras situadas décadas después de que Luke y sus amigos derrotaran al Emperador.

Viejos conocidos regresan, nuevos aliados surgen. Una nueva amenaza se cierne sobre la galaxia. Una nueva historia comienza. Pero, ¿está el Despertar de la Fuerza a la altura de la saga? Para comprobarlo, veámoslo. 

Es hora de volver a una galaxia muy, muy lejana.


Star Wars Episodio VII El Despertar de la Fuerza se sitúa 30 años después de la destrucción de la segunda estrella de la muerte y de que la alianza rebelde derrotara al malvado imperio. Ahora nos encontramos en esa misma galaxia, pero las cosas han cambiado mucho, no así como los problemas del bien y del mal al que tan acostumbrados estamos. En esta película nos encontramos en una galaxia donde todo lo que conocemos ya no existe, donde los protagonistas a los que tanto queríamos son considerados leyenda, y donde los objetos que nos maravillaban, desde el Halcón Milenario hasta la espada láser de Anakin o el casco del mismísimo Vader, mera chatarra y pura fantasía. Caminamos en medio de restos de las batallas pasadas y nos movemos entre mitos y leyendas.

De las cenizas del imperio galáctico, surgió la Nueva Orden, que busca de nuevo instaurar el control y dominio como lo hicieron sus predecesores, con el nuevo lord Sith Kylon Ren a la cabeza. Ante tal amenaza se enfrenta la resistencia, comandada por Leia Organa (Skywalker), respaldados por la Nueva República. Sin embargo, ambos tienen un mismo objetivo: derrotar a su enemigo y encontrar antes que el contrario a Luke Skywalker, el último jedi con vida, la última esperanza para la galaxia, así como el único obstáculo para la Nueva Orden.

En medio de todo este caos, se encuentra Rey, una joven solitaria e independiente con un pasado oculto que ejerce de chatarrera consiguiendo objetos de valor entre los restos de las batallas imperiales para poder venderlos al mejor postor y sobrevivir en el desértico planeta Jakku. También conocemos a Finn, un soldado imperial que huye de sus orígenes, horrorizado por los actos atroces de sus hermanos, y BB-8, una unidad robótica androide que tiene la última pieza del puzzle que podrá cambiar el destino de la galaxia. Cuando éste último acaba por accidente en el planeta de Rey y los 3 acaban cruzando sus caminos y perseguidos por la Nueva Orden, empieza la cuenta atrás para llevar a BB-8 a la base de la resistencia en un intento por cambiar las tornas de la guerra, mientras conocen a antiguas leyendas de la galaxia como Han Solo. ¿Lograrán conseguir su objetivo?


Con esta sinopsis de fondo, arranca la secuela de una de las trilogías más importantes de la historia del cine, en un viaje por los restos de una galaxia que ya no conocemos y donde nos emocionamos cada vez que una antigua nave nos resulta familiar o cuando los protagonistas encuentran reliquias antiguas que nosotros conocemos como la palma de nuestra mano. Constantemente tanto la trama, como la ambientación y los personajes juegan con nuestra nostalgia, y con la magia del misterio que rodea a todo lo que ha pasado durante esos 30 años que no hemos vuelto a esta galaxia. La narrativa, al igual que la trilogía original, juega al despiste y a recoger información a través de las acciones y los diálogos de los personajes, lo que nos ayuda a ir encajando las piezas del puzzle que nos explican poco a poco el pasado de los protagonistas y de los villanos.

A nivel de lenguaje estético y cinematográfico, se respira puro Star Wars, con unos planos, escenarios, decorados y vestuario que lucen espectaculares y que son dignos de llevar el sello de la saga de George Lucas, pues respeta hasta el más mínimo detalle la recreación de dicho universo. De hecho la película en si se puede considerar una carta de amor a los fans por la inmensidad de guiños a la trilogía original que encontraremos en la cinta, desde los planos en Jakku que nos harán recordar los preciosos atardeceres de Tatooine con Luke hasta prácticamente tener que saltar de alegría cuando Han Solo aparece en pantalla junto a su fiel amigo Chewie como si volviéramos a ver a un viejo amigo al que no hemos visto en muchos años. Difícil no sonreír de oreja a oreja y conteniendo las lágrimas al final de la película cuando por fin nos reunimos con Luke mientras éste nos devuelve la mirada y suena el tema principal compuesto por John Williams. 


En este apartado no se le puede criticar prácticamente nada, ya que a niveles de vestuario y efectos especiales han hecho los deberes, con unas recreaciones de batallas espaciales y duelos de sables láser impactantes y espectaculares a la vez que realistas (aunque no tan abundantes como en las precuelas), sin abusar de las CGI de forma alarmante y mezclando adecuadamente el vestuario de los personajes con los efectos por ordenador, incluso recordando a la estética de la película original de 1977. Lo único que puede chillar un poco es lo poco que se han arriesgado a innovar tanto a nivel ambiental, estético o como de diseño de vestuario, siendo casi idénticos a los que vimos en Una Nueva Esperanza (Jakku por ejemplo es claramente una referencia a Tatooine, no menciono más ejemplos para no hacer spoilers). También hay que destacar los trajes de los soldados de asalto, que si bien mantienen la base de los soldados clon e imperiales que hemos visto, son demasiado limpios, hasta el punto de que llaman la atención por parecer de plástico o juguetes, no una armadura de verdad, lo que puede sacarte un poco de contexto, así mismo como al principio puede que el diseño de pelota de fútbol andante de BB-8 no te convenza, pero le acabas cogiendo cariño y ves que funciona.

En banda sonora no desentona tampoco con el resto de la franquicia, pero sí que es cierto que se echa en falta algo de la magia de John Williams, puesto que realmente no destaca salvo en los momentos en que se reutilizan los temas principales de las películas, como el tema de Luke.

A nivel de narrativa, la película cumple bien su trabajo, relatando de forma interesante y sin perder el ritmo de la historia que cada vez va a más, siendo fiel a la película original, contándonos todos los acontecimientos del pasado a través de los actos del presente e incluso guiándonos hacia los posibles acontecimientos que puedan ocurrir, aunque lógicamente deja muchos cabos sueltos para la siguiente entrega. También hay lugar para numerosos momentos cómicos típicos de la historia y abundantes y numerosas referencias a las películas, en especial la primera.


Y es aquí donde realmente se tiene que destacar la estructura del guión y el desarrollo de la historia, que aunque se agradecen los numerosos recuerdos de las películas antiguas, estamos aquí para ver un nuevo capítulo, un nuevo relato. Pero desgraciadamente la película no hace sino contarnos exactamente la misma historia de hace casi 40 años, con exactamente la misma estructura, los personajes ejerciendo los mismos papeles y los desarrollos del argumento acabando exactamente igual: una lucha del bien y del mal donde un miembro de la resistencia manda un mensaje importante en una unidad droide que acaba en un lugar desértico y rescatado por un desconocido ajeno a la guerra que se está librando, y que junto a un amigo y mercenario, escaparán en una nave para llevarlo a la base, para finalmente descubrir el punto débil de un arma increíblemente poderosa y destruírla. Es tal el exceso de guiños, referencias y parecidos, que muchas veces te dará la sensación de estar viendo un remake del episodio IV, y no una secuela como lo que se supone que es. Se centraron tanto en complacer a los fans que olvidaron en crear su propia leyenda, y decidieron antes repetir el ciclo que George Lucas creó. Las precuelas puede que no tuviesen un ritmo igual a ésta o a la trilogía original, pero conseguían crear su propio y coherente relato dentro del universo de la guerra de las galaxias.

Los nuevos personajes resultan muy interesantes, en especial Rey, que rebosa de fuerza y carisma para el papel de protagonista aunque a veces su evolución se ve un poco descompensada y desproporcionada (sus poderes de la fuerza aparecen de la nada y sin embargo ya es más hábil y fuerte que el propio villano que se supone es un nuevo sith). Finn por su parte, quien tenía todas las pintas de ser uno de los puntos flojos de la historia, resulta mucho mejor de lo esperado y acabas empatizando con él a menudo y pudiendo apreciar de forma notable la evolución de ambos. Los nuevos protagonistas nos ayudan a conocer mejor los mundos por el que la cámara nos lleva y coinciden con nosotros en los momentos en que queremos estallar de emoción, ya sea porque acaban de sobrevivir a una batalla espectacular o porque acaban de conocer a una leyenda de los jedi, como si ellos tomaran nuestro propio papel dentro de la historia y fuésemos nosotros quienes emprendiesen el viaje. Pero es obvio que en esta primera entrega quien más luce e incluso en muchos momentos llega a robarles el puesto a los nuevos aventureros es Harrison Ford haciendo de Han Solo, quien interpreta al contrabandista como si de su propia personalidad se tratara. Es como si nuestro querido granuja no hubiera envejecido, y lo mismo se puede decir de Leia Organa, emocionándonos con el reencuentro que princesa y sin vergüenza viven.


Respecto al villano, nos encontramos con haces de luz y de oscuridad: por una parte el nuevo lord sith no se limita a ser una copia de Darth Vader, no nos encontramos con un comandante del mal experimentado y duro como el acero, más bien nos encontramos a un joven aprendiz que se fuerza a sí mismo a seguir un camino que él ha elegido, y a demostrar su fuerza y ocultar su miedo a través de actos de pura ira y rabia, como destruir a mamporros con su sable láser lo primero que encuentra cuando se frustra. Es un villano que evoluciona de forma distinta, no es un camino de redención como el de Anakin (a quien por cierto intentaron imitar con su peinado, puesto que se remarca que tiene mucho de él en su personalidad) sino un camino de caída al lado oscuro en el que aún no controla ni su poder ni sus emociones y que lucha por aplacar para conseguir sus metas. En ese aspecto, el personaje, si se trata como debe en futuras entregas y se evoluciona de la forma correcta, puede dar mucho de sí.


Pero por otra parte, no es el villano que más sorprenda de la saga de Star Wars, y es que tras villanos tan carismáticos o llamativos como Darth Maul, Grievous, Sidious y demás, Kylo Ren no consigue transmitir la misma impresión que causaban sus “ancestros”, y ya ni que decir que no le llega a su “mentor” Vader a la suela del zapato, ya sea en personalidad, impresionabilidad, carisma, diálogos y poder. Pero lo cierto es que tampoco podemos atacar mucho por esta parte, puesto que ésta es solo la primera parte de la historia en la que se nos presenta y porque lógicamente, el carisma de Vader es casi imposible de alcanzar, más todavía al primer intento. A todo esto añadirle que lo poco que consigue impresionar con la máscara, éste se desvanece en el momento en que le vemos el rostro, nada impresionable ni que pegue con el personaje. No consigue destacar o quedarse grabado en la mente como sí lograron todos los villanos anteriores, ni tampoco causa ese temor y recelo que provocaba el antiguo Lord Sith entre sus tropas, más bien todo lo contrario: los soldados y comandantes le tratan como la última mona.

Por tanto, tras todo esto: ¿merece la pena ver El Despertar de la Fuerza? La respuesta es sin duda sí, El Despertar de la Fuerza incluye todo aquello que un fan de Star Wars espera ver en la gran pantalla, fiel hasta la médula de las obras originales y con unos protagonistas que te llevarán de la mano para volver a ver a tus viejos amigos de la rebelión de vuelta a la aventura. Sin embargo, no os esperéis mucha innovación o una historia impactante, ya que el argumento es excesivamente predecible, con una sensación muy fuerte de dejavú respecto a la primera película y con unos personajes obviamente bastante menos impactantes y carismáticos que Han, Vader y compañía.


La fuerza nos está llamando, dejémosla entrar.

7.0.: Perfecto homenaje a la película de Star Wars, mala secuela. Una carta de amor a los fans que encandilará a cualquiera que disfrutara de las películas originales y de Han Solo, pero la falta de creatividad y un argumento predecible le pasa mucha factura para ser una buena secuela del relato de los Skywalker. La nostalgia es la única magia que desprende esta película.

+ A nivel estético, gráfico, de vestuario, lenguaje cinematográfico y ambiental… Esta película respira aire de Star Wars por los cuatro costados.

+ El papelazo de Harrison Ford de nuevo como Han Solo y la interesante protagonista Rey.

+ Efectos geniales efectos especiales que, sin abusar ni desentonar, consiguen sorprender.

+ Las numerosas referencias a la trilogía original.

+ Nuevos personajes interesantes que pueden dar mucho de sí en próximas entregas.




-        Falta total y absoluta de creatividad en el guión. Parece más un remake de Star Wars Episodio IV Una Nueva Esperanza que una secuela de El Retorno del Jedi.

-        La falta de carisma en muchos personajes, más todavía si a éstos se les comparan con los del resto de la saga.

-        El actor del villano no pega ni con cola. El peor villano de la franquicia con diferencia.

-        La película menos original e innovadora de la trilogía. Aunque cumple en fidelidad al universo de la saga galáctica, no aporta su grano de arena como sí lo hicieron en su día todas las películas, precuelas incluídas. 

Para los que querais comprarla, en todas las tiendas está a un precio recomendado de 19 € en DVD, 25 en Blu Ray, y 32 en edición especial metálica Blu Ray.

Aquí el tráiler de la película:






TRANSLATION INTO ENGLISH

It is amazing to realize that 30 years had passed already since we had met the young boy who taught us the ways of the Force, and it is also surprising that more than 10 years had passed too since the moment we thought we had seen the end of the story (or more like the beginning) with Episode III – Revenge of the Sith.

Hadn’t the cycle been completely already? That’s what we thought, until Disney took over Lucas Films and decided to create a new trilogy based on George Lucas’ original ideas, a new series created decades after Luke and his friends defeated the Emperor.

Old friends return, new allies appear. A new threat spreads over the galaxy, and a new story begins. But, is The Force Awakens what we expect from the Star Wars franchise? Let’s check it out.

It is time to return to that galaxy, far, far away…


Star Wars Episode VII The Force Awakens takes place 30 years after the destruction of the second Death Star and the Rebels had defeated the Empire. Now we find ourselves in the same galaxy, but many things had changed, unlike the constant battle of light against darkness that we are so used to. In this movie we find ourselves in a world where everything we once knew does not exist anymore, where the main characters we loved for so long are considered legend, and where the objects that we thought were common but amazing once, from the Millennium Falcon to legendary Anakin’s lightsaber or Darth Vader’s helmet, just mere junk and pure fantasy. We walk between the dust of past battles and we move along legends and myths.

From the ashes of the Galactic Empire, rose the New Order, which search for control and the dictatorship like its predecessors did, with the new sith Kylo Ren leading them. The resistance battles against this threat, leaded by Leia Organa (Skywalker), and backed up by the New Republic. However, both sides have the same mission: to defeat their enemy and find Luke Skywalker, the last jedi alive, last hope for the galaxy, and the last obstacle for the New Order.

In the middle of this war, we find Rey, a young independent girl with a hidden past that works at a yunk yard getting important items from the trash that was left from the Imperial battles, in order to sell them and survive to the desert planet of Jakku. We also meet Finn, an Imperial soldier that runs away from his origins, horrified by the terrible things his brothers had done, and BB-8, a robotic android that keeps the last piece of the puzzle that could change the fate of the galaxy. But when this last one ends by accident on Rey’s planet and the 3 of them cross their paths as they are hunted by the New Order, a race against time starts to take BB-8 to the resistance base in a try to change the war, as they meet ancient legends like Han Solo. Will they be able to fulfill their destiny?

 

With this storyline, starts the sequel to one of the most important trilogies of all cinema history, in a journey through the ashes of a galaxy we don’t know anymore and that we get excited when we find a new ancient relic that’s so familiar to us like if it was one of our hands. The script, the atmosphere and the characters play with our nostalgia constantly and the magic of mystery that surrounds everything that took place during the 30 years we left this galaxy. The narrative, like the original trilogy, plays with cluelessness and to recollect information through the actions and dialogues from the characters, which helps us to complete the puzzle of the story with every single piece they drop in order to understand the background from the characters and their past.

In cinematographic and visual terms, we breathe pure Star Wars with camera shots, scenarios, backgrounds and dressing that look so spectacular that are worthy of being under George Lucas’ franchise’s sell, since they respect the tiniest details and recreation of the universe we find immerse into. In fact, the film could be considered like a love letter sent to Star Wars fans because of the uncountable references to the original trilogy that we will find in the movie, from the camera shots in Jakku, that will make us remember Luke’s shots in Tatooine to practically jump out of joy when Han Solo appears in the screen with his beloved friend Chewie, like if we were coming back to meet an old friend that we hadn’t been with in years. It’s hard not to grin from ear to ear holding back tears when we reach the end of the film and we finally get to meet Luke as he looks back at us waiting as John William’s main theme plays.

 

We practically can’t complain about anything at this level, since the dress design and special effects had been done perfectly, with amazing battle spaceships recreations and impacting light saber fights and realistic (not a big amount of them as we were used in the prequels). The CGI isn’t used so many times and mixing perfectly the real characters with the computer effects, so the film itself clearly a visual reference to the original film from 1977. The only thing that can call the alert is the lack of creativity in terms of planets and backgrounds and dress design since they look almost identical to the ones seen in A New Hope (Jakku for example is a clear reference, if not copy of Tatooine, and like that a lot more). We have to mention the new storm troopers’ armor because, even if they keep the base of the original ones, they look cleaner than usual, to the point of making it look like if it was pure plastic and make them look like toys instead of real armors, getting you out of context. You can also feel a little bit uncomfortable with BB-8’s football design, but you get used to it pretty easy once you see it works.

The soundtrack is at the same level of regular Star Wars music, but we can’t help but to miss some magic that John Williams gets us used to, since it doesn’t shine as much as it usually did in the rest of the movies, except when Luke’s theme plays on the screen.

In level of storytelling, the film does well its job, showing us the interesting events that take place without losing rhythm of action, which increases more and more, being loyal to the original film, telling us events from the past through the present’s actions and even guiding us through the scenes that might take place in the future, of course leaving questions in the air for the rest of the trilogy. There’s place for lots of funny and humor scenes as references to the first film too.


And this is where we really have to talk about the script structure and the story development because, even if it’s nice to see so many references to the original movies, we go to the theatre to watch a new chapter, a new story. Unfortunately, the movie does nothing but to tell us the exactly the same story that George Lucas did 40 years ago, with just the same structure, the same characters doing their same jobs and the story development ending just the same way: a fight between good and evil where a member of the resistance sends an important message into a robotic droid that ends up in a desert planet and rescued by an unknown person unknown to the war that’s taking place, that with a friend and a mercenary, they will escape in a ship to the base, only to discover the weak point of a huge and powerful weapon and destroy it. The excess of references will make you believe most of the movie that you are watching more like a remake of Episode IV than the sequel of the Return of the Jedi. They focused on pleasing the fans so much that they forgot to create their own legend and they rather decided to repeat the story George Lucas created. The prequels might not have the same rhythm The Force Awakens has or the main trilogy does, but at least they were original and created a logical tale that was perfectly attached to the Star Wars universe.

On the one hand, the new characters are very interesting, specially Rey, who has enough strength and carisma for the main roll even if her evolution seems a little disproportionate and out of place (her powers of the force come out of nowhere and yet she is already stronger than the main villain). Finn on the other hand, who looked like if he was going to be the worst and most unnecessary character of the film, ended up being much better than expected, and is a very enjoyable character and seems to develop in a better way. The new characters help us to learn more about the world that surrounds us and where the camera takes us to and their emotions are shared with our own in the moments were we want to jump out of joy after surviving an spectacular battle or because we just met a jedi legend, like if they took our own roll in the movies for us and we were the ones taking the journey across the galaxy. But it’s more than obvious that in this first film the one who shines the most and will steal the main characters’ place is Harrison Ford as Han Solo, who plays the mercenary like if it was his very own personality. It’s like if our beloved rascal hadn’t changed at all, same can be said about Leia Organa, melting our hearts when the princess and the scoundrel meet once again.


On the other hand, the villain has its faces of light and darkness: on the one hand the new sith lord isn’t just a copy of Darth Vader, we don’t find with an experimented villain cold and hard as ice, instead we find a young apprentice who is forcing himself to follow a path of darkness he has chosen, to show his strength and hide his fears through enraged actions, such as destroy the first thing that gets on his way with a lightsaber whenever he is mad. He is a villain that develops in a different way, it’s not a path of redemption like Anakin’s (who by the way they tried to imitate with his hair style, since it’s remembered constantly that he always looked a lot like his grandfather), but a path of downfall to the dark side where he doesn’t know to control his powers or feelings yet, and he has to fight to reach his goals. In that aspect, the character can develop into something very good in the next sequels if he is treated in the correct way.


On the other hand, he isn’t the most impressive villain we’ve seen in the Star Wars franchise, and after such charismatic villains like Darth Maul, Grievous, Sidious and more, Kylo Ren isn’t able to show the same impression that his “ancestors” managed to, not to mention he is far away from his “mentor” Darth Vader on everything (personality, charisma, impression, dialogues and power). But we have to be fair since this is just the beginning of the trilogy, we just met him, and Vader’s charisma, the Star Wars logo, is almost impossible to reach on the first try. We have to add that the little Kylo is able to impress to us with the mask, completely vanishes the moment we see his face, since his face doesn’t fit the character at all. He isn’t able to surprise us or make us feel threated, to shine like the other villains did, he is an easy forgettable character that not even his own troops respect.

Finally, after all of this: is Star Wars the Force Awakens a good film? Yes, no doubt, specially for a Star Wars fan, since it takes everything he needs to the big screen, loyal to the end to the original films with characters that will let you go to meet your beloved heroes from the past going back to the adventure. However, don’t expect a new story or a surprising tale since the storyline is too predictable with a strong dejavú feeling towards the original film and with main characters pretty lame compared to the originals such as Vader and company.


B- Perfect tribute to the original Star Wars film, bad sequel. A love letter to the fans that will enchant anyone who enjoyed the original films and Han Solo, but the lack of creativity and a predictable storyline makes it stay far away from being a good sequel for the Skywalker family. Nostalgic is the only thing this film is able to give.


Here's the final trailer: